Un rockero mendocino es un ser humano. Y como todo ser humano, tiene un lado bueno y un lado malo. El lado bueno es ser rockero. El lado malo es ser mendocino. Estas dos facetas, como en las eternas luchas del Bien contra el Mal, viven en constante oposición.
Un rockero mendocino sueña con vivir de la música, y sabe que eso es posible. Porque la provincia ha cambiado, es cierto, se vislumbra una luz de esperanza. Se puede programar tocar un mes en una sala, otro mes en la otra, pero sólo cantando canciones de Joaquín Sabina, nada más, ni siquiera de Luciano Janello. Y el show debería llamarse “Y nos dieron las diez”, que de paso, ayuda como para grabarle a todo el mundo la hora de inicio.
Un rockero mendocino aspira tener una vida de rock-star.
Un rockero mendocino quiere que llegue el día en que cruce la puerta del cyber de su madrina a las diez de la mañana, los anteojos negros cubriéndole la resaca, y decirle -absolutamente relajado- a la mujer que lo espera detrás del mostrador con una mezcla de preocupación y furia en su rostro: “Anoche, en la Arístides, en el baño de Viracocha, dos rubiecitas tetonas me confundieron con el Leo Mut y me empezaron a petear de una. Me clavé un Viagra que alguien me pasó (no sé quién, estaba muy oscuro), y para serte franco, tía, creo que todo lo que he culiado y culiaré en mi vida no llegará ni a la quinta parte de lo que culié anoche. Vengo del telo. He pasado por aquí de pedo, porque somos parientes, ni siquiera porque seas mi jefa. ¿Vos no te calentás si yo me voy con todo mi rockanroll a dormir la mona?”
Un rockero mendocino siempre va a estar en conflicto consigo mismo por ser rockero en la tierra de la tonada. Porque eso es algo inevitable, algo que tira. El folklore tiene su voz, el folklore está vivo y no se lo calla, te lo hace saber. Y el folklore es muy celoso de su tierra. Hace rato que lo anda celando al rock. Mírenlo a Fernando Barrientos, que abandonó las mieles del rockanroll y se puso a tocar tonadas. Tenía el sueño de que el amor era más fuerte. Y ahora es un celador de sueños.
Por eso se ha escrito este Manual de Autoayuda. Para todos aquellos que empuñan una Gibson Les Paul bajo la inevitable sombra de Don Hilario Cuadros. Para que puedan hacerse a un lado y encontrar su propia luz.
Porque la felicidad existe. Y se parece mucho a la vidriera de Rosáenz.
19 comentarios:
Ja! Cómo te quiero! G-nial.
quiero cantar mi tonada con un dj que sepa lo que quiere decir chapecas, choco, poto, fuenton, alcachofa, sopaipillas, etc.
love u
g
Excelente Iñaki, claro como el agua de la cequia. Para el manual yo propongo, ya que el techo de Mendoza es tan bajo, que bajemos un poco más los escenarios. Por lo menos van a tocar más cómodos.
Que buena que esta!!!! Me encanto!! Excelente optica la suya...
Jajajajaja!!! No podés me morí de la risa. ¿No será que estás preparándome para decirme ese verso de la tía a mi, un domingo de puro sexo y rock?.
Mirá si llega a pasar algun día te voy a decir: andá que se te termine el efecto viagra y volvé a laburar!!!!.
ME ENCANTO!.
Sigue asi de buen alumno!. Se entregan documentos.
La Seño. Verito
Iñaki sos muy capo... me reí mucho con tu manual y quiero leer más!!!
Te mando muchos besos desde este buenoh aireh que acentúa máh mih ya ahpirada tonada.. que no es la de Antonio Tormo.. sino la de una mendocina que se transformó en chilena, sin cruzar la cordillera
Natasha
jajaja, grande bro!
Jose
Me encanto, ya extranaba tus escritos. Espero leer muchos mas, que siga el BAILE!!! TQM Lo
muy buena iñaki, vas a tener que hacerte ver de esas fantasías que te persiguen a toda hora y en cualquier estado, jaja.
Negro sos lo más. me reí muchísimo, muy bueno!!! que no pare!!!!! y por favor tené en cuenta hacer mencion a las groupies del rock mendocino....nos lo merecemos, jajajaja,
besos
me parece que sos un pelotudo,y bastante mas mendocino de lo que describes,es mas sos el tipico mediocre mendocino,chau!
oh captain!! ejemplo de los que encontraron su propia luz y nunca dejaron que se apague. Esa llamita en el atardecer del cementerio. Los que nos pasamos mas años de lo aconsejable esperando por volver, todavía miramos de reojo esa vidriera de la felicidad, y el reflejo nos devuelve la imagen de un grupito de pibes llenos de sueños y trasnoches. Y esa vidriera no miente.
Salú mi hermano. Su amistad es mi lujo.
habia una vez un iñaki...
q buena onda q amotines en el blog, buen medio.. si si.. para sacar a luz esos geniales escritos de autoayuda.
beso gramde gramde y un hasta alguna vez!!?
jjaaj ya no prometo na.
pesiulesita
Querido, Viracocha no existe más, tenés que salir un poquito de noche en vez de dormir la mona!!!
Bienvenuti a blogolandia, hacía falta tu pluma cordillerana.
Pao: michú.
G: loveU, yunou.
Gabi: bajaremos los escenarios, yes.
Lia: cuántos elogios!
Vero: gracias, seño.
Natasha: se te ehtraña.
Bro: lo bueno, si es breve, dos veces breve.
Lore: que siga nomás.
Pasabaxaca: vos también, no te hagás.
Pili: ya se viene el capítulo de las gruppies.
Silver Train: guau. No soy digno.
Pesiu: no prometas nada, nunca cumplís.
Leo: vos sí que tenés noche.
Gracias a todos.
Hola mi hermano! la verdad es que usted no deja de sorprenderme gratamente. Esta idea esta buenisima. VIVAN LOS BAR SAIGON. Para vos, que sos el 5to Saigon. Te queremos mucho. Charly
Querido Iñaki, genial lo tuyo como siempre, aunque no pude leer toda tu "supernova" de cuando estabas en San Luis jajaja.
Te mandamos un abrazo enorme, ahora estamos viviendo en una casa estas invitado al asado cuando quieras!!
Tengo una idea buenísima: hacé otro blog que se llame "El biombo de la ciudad" y que sea más o menos como un lado B o un backstage de éste... ¿No es genial? No, no es mía la idea. ¿Gracioso tampoco es...? Bueno, perdón.
PD: Todo muy bonito pero ¿por qué "blogg" así con dos ges?
Pablezka botón. No te cuento nunca más un secreto.
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